Por Roberto Sosa López
Registros que guardan el pánico de las víctimas, historias verídicas que son narradas al público dentro de un bar clandestino, en una atmósfera llena de suspenso, estímulos y sensaciones. El diseño de iluminación y audio 360º crea un espectáculo inmersivo con relatos que desafían el equilibrio emocional de los asistentes.
El anfitrión es un oscuro archivista que relata cada noche tres historias distintas, entre ellas están: “El soldado arcoíris”, “Dr. Necrofilia”, “El payaso asesino” y “La madre caníbal”. En cada relato el personaje se transforma, encarna y habita al asesino (a), desde sus entrañas narra a los asistentes los tenebrosos sucesos.
El concepto es de Allan Flores, Fernando Villa y Sergio Mingramm, la idea –datos del boletín de prensa- es crear un lugar que recuerde los bares clandestinos de los años 30s; el recinto cuenta con servicio de bar y cocina de autor, de esta forma los asistentes pueden solicitar una copa o algún bocadillo en el transcurso del espectáculo.
Fernando Villa y José Ramón Berganza hacen suyo el montaje, ambos escriben la dramaturgia; Berganza actúa y Villa lo dirige. Con su actuación José Ramón logra que cada historia atrape al espectador; también actor, Fernando sabe lo que José Ramón puede dar sobre el escenario, así lo exige. Entre ambos logran un buen resultado.
Los archivos del horror se presentan en octubre aprovechando las fechas por el Día de muertos o el Halloween según sea tu credo, el teatro se adecua a creencias y conmemoraciones. La consternación es por los relatos verídicos que desde la ficción se relatan para el entretenimiento, así, sin pretender cambiar o aleccionar a nadie. Cada quien conoce su lado oscuro.
El equipo creativo: escenografía, Emilio Zurita; iluminación, María Vergara; diseño sonoro, Alejandro García. El diseño de audio 360º es de IO Sound Post Production. Las funciones son en el Foro Lucerna los miércoles a las 20:30 horas del 5 de octubre al 23 de noviembre.
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