Por Roberto Sosa López
Es teatro documental que reúne los testimonios de los últimos sobrevivientes de lepra dentro de un lazareto en Verdecruz, Quito, Ecuador. Los relatos fueron recabados –datos del boletín de prensa- en el libro Nuestra historia no es mentira. Vivir con lepra en Ecuador, escrito por Beatriz Miranda Galarza. Mario Espinoza director del Centro Universitario de Teatro (CUT) toma el proyecto para llevarlo a escena con la dramaturgia de Ingrid Bravo.
Espinoza contactó a la escritora Beatriz Miranda quien le comparte material grabado con evidencias de los últimos leprosorios en Ecuador. Espinoza toma la decisión que lo registrado se exprese a través de la Técnica Verbatim. “Una técnica de teatro documental que consiste en emplear las palabras exactas a las que uno entrevista. Lo documental es fiel a lo que dicen las personas y el actor funciona como un especie de médium”: Mario Espinoza.
Los personajes que aparecen en el relato son adultos mayores con más de 80 años de edad enfermos de lepra, interpretados por jóvenes actores. El contraste es un acierto, el leprosorio está habitado por ancianos, en la ficción los jóvenes toman sus cuerpos para expresar y compartir con el espectador sus experiencias dentro del lazareto. El texto articula cada uno de los testimonios.
Elenco: Sandra Cecilia, Sebastián Cobos, José Juan Sánchez, Andrés Tirado, Maria Kemp / Ingrid Bravo y Sabrina Tenopala, todos egresados del CUT. El talento que parte de esta escuela de actuación es indudable. Son jóvenes que egresan con convicción, vocación y disposición de ocupar un espacio en este universo que es el teatro.
La puesta en escena recrea un espacio donde los enfermos se encuentran aislados, separados del público por bastidores con acrílicos, el dispositivo se levanta para que los personajes al centro en un espacio vacío, narren sus experiencias. El diseño de espacio, iluminación y vestuario son de Natalia Sedano, sin duda logra un buen resultado. Música original, Cristóbal Mayran; diseño de movimiento Marcela Aguilar.
Verdecruz o los últimos lazaretos es una analogía con los tiempos de pandemia que vivimos. Los leprosos eran confinados para evitar los contagios, vivían aislados y lejos de su familia, esperado que la muerte los liberará del encierro. En resiliencia el transcurrir del tiempo era para ellos un paliativo. Para nosotros el encierro por la pandemia fue incoherente con el transcurso del tiempo.
Las funciones son en el Teatro Santa Catarina los miércoles, jueves y viernes a las 20:00, sábados a las 19:00 y domingos a las 18:00 horas, del 16 de marzo al 10 de abril.
