Por Roberto Sosa López
De bajo costo, dar al cliente o consumidor lo que está dispuesto a pagar, aun cuando esto signifique contaminar, dañar los ecosistemas que deriva en una crisis climática, y con esto el calentamiento del planeta, la extinción de especies animales; incendios, sequías, lluvias torrenciales y grandes inundaciones…la devastación.
La autoría y dirección es de Laura Uribe, espectáculo multidisciplinario que a través de la comedia, el humor negro y el absurdo se pronuncia en contra del consumismo, la contaminación y el cambio climático. Uribe hace teatro desde otro lugar, con otro lenguaje y con otra mirada, el resultado es una puesta en escena bien lograda, reflexiva; los elementos que la componen los vincula y relaciona acertadamente.
La obra nos restriega en la cara el daño que le ocasionamos al mundo que habitamos. El cambio climático es una realidad, la temperatura del planeta ya aumentó un grado, sino hacemos algo ya, para el 2030 serán más de dos grados, el daño será irreversible. El paisaje escénico que la obra nos muestra se quedará corto. El ser humano y su enorme egoísmo es el eje temático.
Se articula con un actor (Antonio Salinas) y cuatro figurantes (José Miguel Mondragón, Claudia Benardi, Benjamín Barrios y Dulce Vianey Martínez). Dirección de arte, escenografía, utilería y vestuario: Sabina Aldana; videoarte y multimedia, Héctor Cruz; iluminación, Tenzing Ortega; diseño sonoro, Homero Guerrero.
Low Cost se presentó ayer en el Teatro Julio Castillo del Centro Cultural del Bosque en el marco de la 41 Muestra Nacional de Teatro
